El esquema más aceptado de los núcleos activos incluye un agujero negro supermasivo, alimentado por un disco de acrecimiento, una estructura de polvo (normalmente simplificado como un toro), una región que produce líneas anchas en el espectro óptico/infrarrojo (conocida como BLR), una región de líneas anchas (NLR) y en ocasiones un jet relativista. Se ha sugerido que estas componentes se encuentran en todas las familias de núcleos activos, donde la principal diferencia es el ángulo de visión respecto al observador y la preponderancia de cada una de estas componentes respecto al resto. Esto es conocido como el modelo unificado de núcleos activos de galaxias y se ha probado válido para una gran parte de los núcleos activos. Sin embargo no podemos explicar todas las familias de núcleos activos bajo este modelo. En particular, los núcleos activos de baja luminosidad son especialmente difíciles de entender bajo este modelo. Desde el punto de vista teórico, disco de acrecimiento, toro y BLR parecen no poder sostenerse debido a la baja luminosidad de estos objetos. Que poco nos queda para llamarlos núcleos activos no? De hecho la desaparición del disco de acrecimiento recuerda a binarias de rayos X, cuyo estado de acrecimiento cambia de un estado donde un disco de acrecimiento domina la emisión, a un estado donde es una corona poco eficiente la que domina la emisión, desaparecido parte del disco de acrecimiento. En este sentido pueden ser claves para entender el estado (quizás evolutivo) de los núcleos activos. Pero, que sabemos desde el punto de vista observacional? En este coloquio intentaré hacer un repaso por todas evidencias de la existencia de BLR, disco de acrecimiento (o estado de acrecimiento), y toro de núcleos activos de baja luminosidad.